La receta del viajero perfecto

20.05.2023

Ingredientes

100 g / adaptabilidad

En los últimos años, hemos visto que ser capaz de adaptarse a nuevas situaciones forma parte del ser humano. Quizá la famosa frase: ¡adaptarse o morir! sea un poco brutal, pero desde luego no está tan lejos de la verdad. Para un viajero, la palabra "adaptarse" es claramente un pilar de su forma de ser, ¡y sería impensable viajar de otro modo! Pero, ¿qué significa exactamente saber adaptarse? Podría enumerar fácilmente un montón de sinónimos, pero al final seguiría usted confundido y quizá más que antes. Así pues, saber adaptarse para un viajero significa poseer la capacidad de afrontar el cambio y, por tanto, ser capaz de adaptarse a él. Por desgracia, para muchos, saber adaptarse se confunde a menudo con resignarse, ¡y eso es un error! Por el contrario, el verdadero viajero sabrá utilizar estos cambios en su propio beneficio. De acuerdo, algunos cambios pueden planificarse dirá usted..... Por supuesto, pero son los imprevistos e imprevisibles los que tendrá que aprender a gestionar y a adaptarse. Una de las soluciones que podría venir en nuestra ayuda sería sin duda un cambio de perspectiva, de hecho, una vez que hayamos completado nuestro análisis del cambio y sus consecuencias, podríamos analizar con seguridad los aspectos alternativos. ¿Cuáles podrían ser los aspectos positivos? ¿Qué puertas se le podrían abrir que nunca había considerado? Por supuesto, todo dependerá del tipo de cambio y de su posible gravedad, ¡pero eso es lo que significa la adaptación!

150g / improvisación

Como todos sabemos, la vida rara vez se desarrolla según lo previsto, pero a pesar de este conocimiento, la tendencia de muchos es a aferrarse a una lista de tareas pendientes obstinadamente determinada. Para un viajero, los planes son tan inútiles como superfluos. ¿Sabe lo que le espera a la vuelta de la esquina? ¿Sabe adónde le lleva ese camino? No lo creo, así que querido viajero, tire su planificación a la papelera y prepárese para enfrentarse a lo inesperado. El viajero sabe afrontar los fracasos sin miedo, son inevitables, y si viaja con el miedo al fracaso no será capaz de moverse ni un metro. Por eso, cuando consiga superar sus miedos y temores, tendrá más confianza en sí mismo y será más capaz de adaptarse a lo inesperado. ¿Quiere viajar? Entonces, ¡tenga confianza en sí mismo!


1kg / optimismo

¡Dejemos el vaso medio lleno o medio vacío! El optimismo se considera un elemento clave en la gestión del estrés. Ser optimista no significa necesariamente ignorar las dificultades de la vida, pero sí afrontarlas de otra manera. Si su visión del mundo siempre ha sido pesimista, puede que no le resulte fácil cambiar de perspectiva; sin embargo, con un poco de paciencia y conciencia, siempre es posible resaltar los aspectos positivos de cada cosa. Un viajero pesimista se encontrará en serias dificultades consigo mismo y con los demás. No importa si su vehículo se avería o su avión se retrasa, intente más bien aceptar la situación en la que se encuentra y, quién sabe, puede que salga de ella algo inesperado e incluso inolvidable.


130 g / respecto

El respeto es un sentimiento que se muestra hacia alguien o algo, y muchas formas de respeto se basan en la relación de reciprocidad, "respeta y serás respetado". Para el viajero, el respeto es sin duda un aspecto fundamental que no se puede eludir. No importa adónde vaya ni lo que haga, dondequiera que vaya, recuerde que será un forastero, no es local, y por lo tanto debe mostrar a las civilizaciones indígenas y a su territorio un gran respeto. Intente amalgamarse con sus culturas y trate sobre todo de comprenderlas, y verá que como por arte de magia, se encontrará pensando, aunque sólo sea por un momento, que no está tan lejos de ellos. No juzgue y, sobre todo, no se desahogue con ellos basándose en estúpidos prejuicios que haya podido escuchar en la televisión. El viajero sabe comprender, sabe aceptar, sabe mirar y sobre todo tiene la capacidad de entender que el mundo es bello porque es variado.

250g / curiosidad

¿Por qué quiere viajar? Seguramente, o al menos eso espero, no es sólo para colgar una foto en su perfil social, espero más bien que su deseo de viajar esté motivado principalmente por la curiosidad de descubrir, ver y experimentar... No todos somos curiosos de la misma manera, pero todos los viajeros poseen una buena dosis de ella, que les sirve de combustible para continuar. No piense que lo ha visto todo, el mundo es demasiado grande para nuestros ojos, siga caminando o conduciendo en la dirección que le parezca la correcta, la más inexplorada. La curiosidad es una actitud de exploración y de mente abierta, libre de prejuicios. Para un viajero es lo más importante, la curiosidad mantiene activo su viaje y no lo "marchita". La idea de detenerse ni siquiera debe tocarle, porque en el momento en que crea que lo ha visto todo, su viaje habrá llegado a su fin. Su motivación empezará a decaer lentamente hasta arrastrarle a una hipotermia mental, ¡capaz de hacerle creer que el mundo se acaba allí mismo!


150g / gestión del tiempo

Saber gestionar el tiempo durante un viaje es una cualidad extremadamente útil para todos los viajeros. La primera distinción que hay que hacer es la diferencia entre vacaciones y viaje. En vacaciones, nuestro tiempo está marcado por una fecha límite que nos lleva inconscientemente a tener que ver, experimentar y disfrutar del mayor número de cosas posible para dar sentido a nuestras vacaciones. Otros, en cambio, tras meses de trabajo agotador, ven las vacaciones como el equivalente a una relajación total en la playa y cócteles de colores para las próximas 2 ó 3 semanas. Para el viajero, en cambio, el tiempo no es, o no debería ser, un factor de estrés. Al contrario, el viajero debe saber gestionar su tiempo y así poder encontrar el equilibrio adecuado. Si su viaje es largo, déjese arrullar por la palabra "largo", tómese su tiempo y empiece a reducir la velocidad. Viajar deprisa, sobre todo en un vehículo, conlleva grandes gastos, así que si no quiere agotar su dinero en unos instantes, será mejor que se calme y confíe en la tranquilidad. Ser consciente del propio tiempo nos ayuda a tomar decisiones y, sobre todo, nos protege de los peligros de la prisa. ¡Lento y constante se gana la carrera!


Mezclando estos ingredientes enumerados anteriormente, el resultado debería ser satisfactorio. Todos ellos son ingredientes de primera calidad, y si algo saliera mal, la culpa sería sin duda del cocinero. Antes de empezar, asegúrese de conocer bien los ingredientes para evitar manipularlos mal. Para un leudado correcto, es aconsejable añadir una buena dosis de paciencia y respetar la dosis indicada.


SALVO